12/12/2015
"Cuidado...Alerta."
Camping bien situado en el Prepirineo, excelente la comarca y sus gentes, las instalaciones muy buenas. Que lo estropea todo...la dirección. Nosotros hemos estado más de tres años. Al principio todo sonrisas..que si ponte suelo en el avance que aísla del frío, que si ponte césped artificial que es más limpio, en fin, una inversión importante. Al poco tiempo nos dimos cuenta donde nos habíamos metido. La mayoría de los campistas son fijos de muchos años en la zona que estábamos, y se piensan los dueños. Las normas de convivencia no van con ellos. Fiestas hasta las 4 de la madrugada, drogas, alcohol, gritos, vamos, insoportable. Y esto todos los fines de semana. Al principio nos autoengañábamos (será un cumpleaños, será un día especial). La dirección siempre nos contestaba que iban a dar un ultimátum. Les enviaban una carta con las normas y punto. Los incívicos seguían igual y peor, pues se reían en nuestra cara y Marta, Josep, Xavi y Pere, (la dirección) nos decían que no podían hacer nada, y no nos dieron más solución que cambiar de parcela. Como comprenderéis, eso no es solución, así que nos hemos tenido que marchar, previo paso por taquilla, pues después de aguantar todo lo que hemos aguantado, aún nos dicen que teníamos que pagar la diferencia de la temporada porque hemos estado los meses más caros del año (el verano). Tuvimos que pagar 600?, hasta el último céntimo, por un servicio que no, nos han prestado. Ahora vosotros ya lo sabéis. Sí buscáis fiesta, botellón, un lugar donde reine el incivismo, es vuestro sitio.
Positivo: La comarca, la ciudad amigable.
Negativo: Una gerencia-dirección que permite que los incívicos se impongan a los campistas respetuosos.