06/02/2006
Positivo: A favor: la situación, en pleno centro de Bilbao y a 10 minutos andando del Guggeheim. Habitaciones orrectas, "sin más", ni un sólo "detalle". Por sacarle "tres pies al ato": en recepción te dejan con tu equipaje a tu aire, te apañas tú sola. El personal distante y displicente, ausencia de amabilidad añadida. En la cafetería, a la hora del desayuno, sólo daban bebidas: ni un triste croissant, bollo o tostada. Si quieres desayunar en el Hotel obligado de pagar el precio desorbitante del Buffet. Ruidos, muchos ruidos en los pasillos pues las puertas están mal encajadas.